Bioderecho: Una diplomatura cada vez más necesaria

Diplomatura en Bioderecho. Cierre y anuncio. El derecho de los padres en la educación de los hijos.

En mayo del corriente año, a partir de un convenio celebrado entre la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (UNSTA) y el Colegio de Abogados de Tucumán, se lanzó una diplomatura en bioderecho, que contó con la participación de destacados docentes, bajo la dirección académica de la Dra. Débora Ranieri, con formato semipresencial para los que viven en Tucumán y virtual para los que residen fuera de ella.

El pasado 17 de diciembre de 2022, en sede central de UNSTA, finalizó esta diplomatura y fue precisamente su directora -Dra. Ranieri- quien vino a ponerle el broche final, no sin antes anunciar -con júbilo- que en 2023 se dictará una segunda edición de la misma.

En su clase del día 16/12/2022 la Dra. Ranieri abordó el tema de “la familia y el derecho de los padres en la educación de los hijos”, cuyos conceptos centrales queremos compartir con ustedes.

Luego de presentar el tema y de aclarar que la relación entre la familia y el estado constituye un asunto milenario, la jurista precisó que el mejor modelo es aquel que se funda en el realismo jurídico, que toma como punto de partida una adecuada antropología y que respeta el orden natural.

Inspirada en la filosofía de Aristóteles y en el sentido común, advirtió que la existencia de la familia es anterior a la de la polis y que la familia es unidad básica de la sociedad, por lo que misión del estado no es otra que la de respetarla y ayudarla.

En efecto –continuó la docente- si uno se pregunta de dónde surge el derecho de los padres a educar a sus hijos conforme a sus convicciones morales y religiosas, la respuesta -sencillamente- se encuentra en que fueron los padres –como colaboradores de Dios- quienes dieron la vida a sus hijos y son ellos quienes tienen la responsabilidad primaria de educarlos.

Ciertamente –indicó- los padres no pueden satisfacer todas las necesidades de los hijos y necesitan ayuda de la sociedad escolar, religiosa, cultural, universitaria, etc.

Más esta delegación de ejercicio –aclaró- debe actuarse de conformidad al principio de subsidiariedad, en la inteligencia de que el estado (en sentido amplio) puede ayudar a la familia, pero no absorberla ni sustituirla.

Reflexionó que, allí donde impera el principio de subsidiariedad, se da un punto de equilibrio y armonía entre la familia y el estado, que trae como fruto la concordia y la paz social.

A continuación, pasó revista por el amplio marco jurídico que rige en la materia, de donde resulta que la familia es la célula fundamental de la sociedad y que los padres tienen el derecho prioritario de elegir la educación de sus hijos, siendo interesante ver –apunta la profesora- que, a pesar de la confusión actual, los textos siguen allí y no han sido derogados, de modo que a nivel jurídico, no está todo perdido.

Para contrarrestar la crisis que vivimos en nuestros días, con la caída de la unidad familiar y el aumento del individualismo, urge la tarea de reconstituir la sociedad desde la base, a partir de la familia, pues si quitamos el resorte de la familia –añadió- vamos a tener jóvenes frágiles y vulnerables que no podrán alcanzar el auténtico desarrollo humano al que han sido llamados.

El desafío que atravesamos hoy –concluye la Dra. Ranieri- consiste en fortalecer la familia para que pueda brillar como lámpara encendida en una sociedad líquida de relativismo cultural.

Al final de la clase, los alumnos (locales y extranjeros) transmitieron su profundo agradecimiento por las valiosas enseñanzas recibidas en este curso, máxime en tiempos de crisis en que no es frecuente encontrarse con iniciativas de este tipo.

De nuestra parte, felicitamos a las instituciones que hicieron posible esta diplomatura, al cuerpo docente y a los alumnos que participaron de ella, pues -sin dudas- se trata de un espacio académico que contribuye a recuperar un sano orden social, fundado en una visión auténtica del hombre y de la familia, donde el estado asuma el rol subsidiario que ocupa en la materia, para que el bien común sea posible en nuestros días. Asimismo, anhelamos que los frutos de la segunda edición de la diplomatura sean tan abundantes como los de la primera.

Gonzalo Castellanos

El desafío que atravesamos hoy es fortalecer la familia

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