Cabe esperar que entren más proyectos en los próximos días ya que otros diputados anunciaron que trabajan sobre el tema.
El expediente 2285/2024 está encabezado por Carolina Gaillard y fue cofirmado por los diputados de Unión por la Patria: Gabriela Estévez; Blanca Osuna; Leandro Santoro; Mónica Macha; Juan Manuel Pedrini; Mónica Litza; Lorena Pokoik; Carolina Yutrovic; Micaela Morán; Tanya Bertoldi; Andrea Freites; Eugenia Alianiello y Brenda Vargas Matyi.
El proyecto establece “el derecho a la muerte voluntaria médicamente asistida” a partir de los 18 años y prevé dos modalidades: a) Eutanasia: administración directa de una sustancia que provoca la muerte y b) Suicidio asistido: suministro de una sustancia letal, que el paciente se auto administre.
La práctica se aplicaría a pacientes que estén sufriendo una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante, que “a juicio de la persona resulten indignos o intolerables”. Si el médico tratante y el médico consultor coincidieran en la pertinencia de la solicitud, la práctica se realizará en un plazo máximo de tres (3) días. Si manifestaran disidencias la solicitud se elevaría a la Comisión Jurisdiccional y de persistir las divergencias a la Comisión Nacional para que revise el caso.
El proyecto se funda -como todas las iniciativas sobre eutanasia- en la pretendida “autonomía de la voluntad”, que sostiene que el hombre puede ser criterio y norma de sí mismo.
La objeción de conciencia prevista es acotada, ya que el profesional objetor “debe derivar al paciente de forma adecuada y oportuna, sin dilaciones”. Mientras que los establecimientos de salud que no cuenten con profesionales dispuestos a practicar la eutanasia deberán disponer la derivación a un efector que la realice.
La ley sería "de orden público y de aplicación obligatoria en todo territorio de la República Argentina". La práctica se incluiría en el Programa Médico Obligatorio (PMO) con cobertura total.
El otro proyecto (expediente 2241/2024) es de la autoría de la cordobesa Gabriela Estévez que desde hace tiempo impulsa la “Ley Alfonso” por el caso de Alfonso Oliva, un joven de su provincia que tenía esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y falleció en 2019. La presentación fue acompañada por sus compañeros de bloque: Carolina Gaillard, Mónica Macha, Daniel Gollán y Matias Molle.
Prevé como el otro proyecto la participación de un médico tratante y de un consultor, mientras que la tercera valoración la emitiría una Consejería, con especialistas en psiquiatría y psicología. Una vez cumplido este último trámite se deberá esperar un periodo de quince “días útiles” antes de practicar la eutanasia. Se crearía una Comisión Nacional de Evaluación y Control en el ámbito del Ministerio de Salud de la Nación para garantizar el cumplimiento de la Ley.
Contempla las mismas modalidades que el proyecto de Gaillard: eutanasia y suicidio asistido. La objeción de conciencia está igualmente acotada, también incluiría la práctica en el PMO. Asimismo, sería una ley de orden público y de aplicación obligatoria en todo el país