Apareció en Estados Unidos, The Woman In Me, el libro de memorias de Britney Spears.
Hace unos días se conocieron algunas de las revelaciones que contiene. El libro trae confesiones, acusaciones, alguna que otra explicación y varias muy buenas anécdotas.
Es parte de la nueva vida de Britney, de esa que empezó (o se reinició) a fines de 2021 cuando recuperó el control de su vida.
Hasta la salida del libro, el gran canal de comunicación de Britney era su Instagram. The Woman in Me es una mirada vasta sobre su vida agitada, veloz, compleja y muchas veces dolorosa.
Durante 13 años, Britney estuvo bajo la tutela y curatela de su padre, James P. Spears. La medida de protección fue dispuesta por un juez en 2008, tras dos internaciones de la cantante en instituciones psiquiátricas.
Britney cuenta en sus memorias que hubo un momento durante esos 13 años en el que flaqueó y dejó de luchar, se entregó, vencida, al control que ejercía su padre. Sabía que podía perder definitivamente lo que más le interesaba: pasar tiempo con sus hijos.
Afirma que se dio cuenta de la realidad, recién cuando la tuvieron horas inmovilizada en una camilla, en ese momento supo que podían retenerla el tiempo que quisieran: “Estaba dispuesta a sacrificar mi libertad por compartir las siestas con mis hijos. Era un tratado que iba a aceptar”.
A fines de 2021 recuperó el poder de decidir sobre sí misma, recién en ese momento, luego de 13 años, la tutela judicial ejercida despóticamente por su padre llegó a su fin. Unos meses antes había dado una declaración de más de 20 minutos en frente de los tribunales que trataban su caso que conmovió a la opinión pública e hizo cambiar de opinión a la magistrada. Por supuesto que todo eso es material del libro: la relación con el padre, el tiempo bajo control y su pelea por recuperar el dominio de sus actos, por poder decidir sobre su vida.
Britney siempre estuvo bajo la mirada ajena, sus movimientos estuvieron restringidos, vigilados, por los ojos de otros. Es la mujer sin intimidad. Los fans, la prensa, el juez, los doctores, su padre. Escribe: “Me terminaron sacando todo. Los chicos, mi perro, mi casa”.
El fragmento de los anticipos del libro que más difusión obtuvo, sin dudas, es en el que narra el aborto luego de quedar embarazada de Justin. Britney no veía el embarazo como una tragedia, ella quería tener el bebé. Pero Justin no estaba de acuerdo. La noticia no lo alegró. Creía que eran demasiado jóvenes, que ya tendría otra oportunidad. Y convenció a la cantante para abortar.
"Fue una sorpresa, pero para mí no fue una tragedia. Amaba mucho a Justin. Siempre esperé que algún día tuviéramos una familia junta. Esto sería mucho antes de lo que había previsto. Pero Justin definitivamente no estaba contento con el embarazo. Dijo que no estábamos preparados para tener un bebé en nuestras vidas, que éramos demasiado jóvenes", es una de las confesiones sobre el tema que podremos leer en el libro. "Si hubiera dependido únicamente de mí, nunca lo habría hecho. Y, sin embargo, Justin estaba tan seguro de que no quería ser padre".
Además, ha calificado este episodio de su vida como "una de las cosas más agonizantes" que ha sufrido en su vida.