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El jugador senegalés Idrissa Gueye, del París Saint-Germain (PSG), rechazó ponerse la camiseta con los colores de la bandera LGTBI que usó el elenco parisino el pasado sábado en el partido en el que goleó 4-0 de visitante al Montpellier
El jugador cuestionado y la casaca que se negó a usar
El tema derivó en un pedido de sanción de parte del lobby LGBT
Gueye, de 32 años, siguió el partido desde las tribunas del estadio luego de bajarse de la convocatoria, que en un principio armó el entrenador Mauricio Pochettino que aseguró que el futbolista no tenía ningún problema físico, pero no jugó el partido por “un motivo personal”.
La temporada pasada Gueye evitó el partido en el que el PSG apoyó al movimiento LGTBI+ portando una camiseta similar. En el momento el africano esgrimió una gastroenteritis.
La Federación Deportiva LGBTI+ se pronunció al respecto. Lo hizo a través de su presidente Eric Arassus, quien pidió una sanción para el senegalés por homofobia. “Podemos decir que la homofobia es una realidad en el deporte. Todos sus compañeros apoyaron la causa y él es la única persona que no. Es importante que se sancione a Idrissa Gueye. Su club realmente necesita comprometerse con esto”
Al reclamo se sumó la presidenta del consejo regional de la Isla de Francia, situada alrededor de París, Valérie Pécresse, quien lamentó la actuación del futbolista y pidió sanciones: “Los jugadores de un club de fútbol, y los del PSG en particular, son figuras de identificación para nuestros jóvenes. Tienen el deber de dar ejemplo. ¡La negativa de Idrissa Gana Gueye a unirse a la lucha contra la homofobia no puede quedar sin sanción!”.
También la asociación para la lucha contra la homofobia en el deporte Rouge Direct ha reclamado medidas contra el futbolista: “La homofobia no es una opinión sino un delito. La LFP (Liga) y el PSG deben pedir explicaciones a Gana Gueye y muy rápido. Y sancionarlo si es necesario”
De este modo se muestra el rostro violento e inquisidor de ésta IDEOLOGÍA que no admite disentir aunque se presenta como un pensamiento abierto, y que ahora cuenta con el apoyo de ciertas leyes y de los poderes económicos
Se muestra el rostro violento de esta ideología